
Franco Guerzoni (Módena, 1948), artista, emprende a principios de los años Setenta una labor personal de investigación dedicada a la exploración del mundo de la arqueología, con una especial atención a aspectos ligados a la estratificación de la cultura y a la idea de “antiguo” como pérdida y sustracción. Se dedica al estudio de sistemas precisos de representación de la imagen, obtenida incluso por medio del medio fotográfico, en continua comparación con la labor de sus contemporáneos (entre ellos, Vaccari, Parmiggiani, Ghirri).