De acuerdo con el principio en el que se funda este trabajo, el espacio es absoluto, no hay diferencia ni solución de continuidad entre la repartición de muros y el mobiliario, entre los pavimentos y los revestimientos, entre las divisiones transparentes y ciegas, entre los sistemas de separación móviles y estáticos, entre los acabados de los muebles y las superficies de las encimeras.
Fuertes evocaciones matéricas definen las superficies verticales y horizontales, orientadas hacia un estilo que mantiene la armonía entre la naturaleza y la tecnología, subrayado por la combinación de madera de roble sometida a tratamiento térmico, chapas de hierro en bruto, superficies de Corian, revestimientos con losas Oversize de gres inspiradas en piedras y mármoles naturales, paredes divisorias de vidrio coloreado y transparente, puertas y paneles lacados con acabo pulido y mate.
Al estudiar la distribución funcional durante la elaboración del proyecto, la zona de día se separó mediante espacios medianeros de todos los ambientes de la zona de noche, para ofrecer a estos últimos el nivel necesario de intimidad y aislamiento.