El proyecto arquitectónico es fruto de un estudio atento y una gran sensibilidad dirigida a los jóvenes que vivirán y residirán en este lugar, en este hogar. Y es que el punto cardinal de este proyecto es, precisamente, el concepto de «hogar».
La estructura no es un simple «contenedor» de funciones, sino que responde de la mejor forma posible a las necesidades de los usuarios, por lo que ha sido considerada apta por las autoridades sanitarias competentes en materia de psiquiatría infantil del gobierno provincial de Brescia.
La modernidad de la arquitectura también se observa en la continuidad entre las paredes y el alero de la cubierta como elemento único que «reviste» la superficie vertical. Este concepto se enfatiza mediante un uso acertado de distintos colores en el revoque.
«A diferencia de otros proyectos, para mí éste ha representado una oportunidad de reflexionar sobre el papel cívico de mi trabajo, al tener que imaginar la arquitectura como un elemento importante de lo que conocemos como ‘el bien común’. Se trata de un proyecto que podría convertirse en un modelo para todo el país y que dona visibilidad a la comunidad de Orzinuovi a nivel nacional».